Este jardín particular se reformó a fondo en el 2006. Después de un año ya tenía un aspecto adulto ya que todos los árboles y rododendros se plantaron en tamaños grandes. El “seto” de Quercus robur “Fastigiata” salvaguarda inmediatamente la tan desea intimidad. El poco común Quercus rubra “Aurea” con sus tonos dorados provoca un efecto luminoso y soleado que ofrece resguardo a las casitas de juguete de los niños. Pero el que más llama la atención en el jardín es el Cornus controversa. Dotado del espacio suficiente, resplandece como árbol solitario.